Contra viento y marea / Against all odds

Contra viento y marea

Poca duda cabe ya de que el año 2020 ha sido atípico y nos ha proporcionado múltiples y nuevos desafíos en todos los ámbitos, tanto personal como profesional. Como no podía ser de otro modo, la campaña de campo con los halcones de Eleonor de Canarias se vio también resentida por dificultades tanto económicas como administrativas. Con todo en contra, lo fácil y, probablemente lo más sensato, hubiera sido abandonar, pero esa no es una opción para nuestro equipo. 

Mucho más tarde que de costumbre, logramos finalmente acceder a los islotes a principios de septiembre. Para entonces, la reproducción de los halcones estaba muy avanzada y eso supuso una gran pérdida de información, como el número de parejas que, pese a iniciar la reproducción, fracasa de forma temprana, o el tamaño de puesta. Cada año, dedicamos un gran esfuerzo en los meses de julio y agosto para localizar los nidos activos y, especialmente, para identificar a los adultos reproductores. Obviamente, esta tarea tampoco pudo completarse como nos hubiera gustado y varios ejemplares, pese a estar anillados, no pudieron ser identificados. Toda esta información resulta esencial en los estudios a largo plazo que, como el nuestro, pretenden examinar variaciones entre años en parámetros básicos que determinan la dinámica de la población. 

La información generada anualmente mediante el seguimiento de la población y los datos de movimiento proporcionados por los GPS-dataloggers es la base del presente proyecto de investigación y de todos los estudios que se llevan a cabo con esta población. A lo largo de los años, este proyecto ha permitido la creación de una gran red de colaboración internacional, que nos está permitiendo dar respuesta a cuestiones de gran relevancia, tales como el papel de la variación de las condiciones climáticas en las probabilidades de persistencia de la población canaria de halcón de Eleonor, con claras implicaciones para la conservación de la biodiversidad de Canarias. Por ello, interrumpir un año de datos puede tener consecuencias catastróficas desde el punto de vista de la investigación.

Pese a todos los inconvenientes, logramos hacer muchas cosas, eso sí, en tiempo récord y dejándonos la piel, aunque esto último es lo habitual. La campaña de campo se complicó aún más, si cabe, porque no pudimos establecer un campamento base en Alegranza, como llevamos haciendo desde el año 2006, sino que las tareas tuvieron que llevarse a cabo mediante sucesivas visitas a la isla. 

Desde el punto de vista de los halcones, sin embargo, el año 2020 no puede considerarse malo. Localizamos un total de 124 nidos activos en Alegranza, 123 de los cuales pudieron ser monitorizados. Los islotes de Montaña Clara y Roque del Este, sin embargo, no pudieron ser prospectados. En 2020, el porcentaje de parejas con éxito fue del 92.68%. Esta cifra, la cual puede considerarse bastante elevada, resulta ligeramente superior a la obtenida en 2019, donde el porcentaje de parejas con éxito fue del 91.82% (N= 110 parejas monitorizadas en 2019). La productividad, calculada como el número de pollos volantones (aproximadamente 35 días de edad), respecto al número de parejas controladas, fue de 1.83, cifra en este caso inferior a la registrada en 2019, que fue de 1.98 pollos/parejas controladas. Aunque este dato de productividad es elevado, cabe destacar que un número considerable de pollos (N= 37) murieron en el nido o fueron predados por otros halcones vecinos debido a periodos intermitentes y prolongados de falta de alimento que, como sabemos, en esta población están fuertemente determinados por los patrones de vientos alisios.

En el presente año, se han anillado un total de 213 pollos en nido cuando contaban con aproximadamente 25 días de edad. Como es habitual, a cada ejemplar se le colocó una anilla metálica convencional con remite Aranzadi y una anilla plástica de color amarillo y código alfanumérico de dos dígitos, la cual permite la identificación a distancia.

Estos nuevos anillamientos se suman al total de ejemplares anillados desde el inicio del proyecto en el año 2006, el cual asciende a 2364 individuos. Aunque, como decíamos, la identificación de ejemplares anillados en años anteriores no pudo realizarse como nos hubiera gustado, logramos realizar un total de 146 recapturas visuales. Entre estas lecturas, se ha podido comprobar la presencia en Alegranza de un elevado número de ejemplares nacidos en 2019 (N= 26). Estos individuos regresan al archipiélago Chinijo por primera vez después de que iniciaran su primer viaje migratorio de ida y vuelta a Madagascar. Esta información es de especial relevancia para determinar las tasa de supervivencia de esta fracción de la población y sus probabilidad de reclutamiento futuro, con un poco de suerte, como reproductores en la población canaria de la especie. 

En 2020 se localizaron un total de nueve ejemplares equipados con dispositivos GPS, cinco de ellos nidificando en la vecina isla de Montaña Clara. La información almacenada en los dispositivos pudo descargarse de manera exitosa en siete de ellos gracias a la estación base situada en Alegranza y a la red de antenas portátiles establecida en ambos islotes.

Lamentablemente, también hay malas noticias. En el mes de septiembre localizamos dos ejemplares muertos en la presa de Alegranza. Uno de ellos estaba anillado con anilla plástica Az[7F], por lo que pudimos comprobar que se trataba de una hembra nacida en Alegranza en 2012 que criaba en esta isla, al menos desde 2017. Dichos ejemplares fueron recogidos por agentes de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote, siguiendo el protocolo establecido de levantamiento y envío para llevar a cabo la necropsia y análisis pertinentes para tratar de determinar la causa de la muerte.

El viento y la marea son dos elementos que están y estarán siempre irremediablemente unidos a los halcones de Eleonor y a los islotes donde nidifican. Este año, soplaban en nuestra contra, pero, con perseverancia y mucho esfuerzo, logramos capear el temporal y llegar a buen puerto.


Against all odds

There is little doubt that the year 2020 has been atypical and has provided us with multiple and new challenges at both personal and professional levels. The field campaign with the Eleonora’s falcons from the Canary Islands was also affected by both economic and administrative difficulties. With everything against, the easy and probably the most sensible thing would have been to quit, but that is not an option for our team.

Much later than usual, we finally managed to access the islets in early September. By then, the reproduction of the falcons was very advanced and this meant a great loss of information, such as the number of pairs that, despite starting reproduction, fail early, or the clutch size. Every year, we make a great effort in July and August to locate active nests and, especially, to identify breeding adults. Obviously, this task could not be completed as we would have liked and several individuals, despite being ringed, could not be identified. All this information is essential in long-term studies that, like ours, seek to examine variations over time in basic parameters that determine population dynamics.

The information generated annually by monitoring the population and the movement data provided by the GPS-dataloggers is the basis of this research project and of all the studies carried out with this population. Over the years, this project has allowed the creation of a large international collaboration network, which is allowing us to respond to highly relevant questions, such as the role of variation in climatic conditions in the probability of persistence of the Canarian population of the Eleonora’s falcon, with clear implications for the conservation of the Canarian biodiversity. Therefore, interrupting a year of data can have catastrophic consequences from the research point of view.

Despite all these inconveniences, we managed to do many things, but in record time. The field campaign was even more complicated, if possible, because we were not able to establish a base camp in Alegranza, as we have been doing since 2006, but rather the tasks had to be carried out through successive visits to the island.

From the falcons’ point of view, however, 2020 cannot be considered as a bad year. We located a total of 124 active nests on Alegranza, 123 of which could be monitored. The islets of Montaña Clara and Roque del Este, however, could not be surveyed. In 2020, the percentage of successful pairs, calculated as the number of pairs that produce at least one fledgling, divided by the number of pairs that start breeding * 100, was 92.68%. This figure, which can be considered quite high, is slightly higher than that obtained in 2019, where the percentage of successful pairs was 91.82% (N = 110 couples monitored in 2019). Productivity, calculated as the number of fledglings (approximately 35 days old), with respect to the number of pairs monitored, was 1.83 (N = 123), a figure in this case lower than that registered in 2019, which was 1.98 (N = 110). Although this productivity data is quite high, it should be noted that a considerable number of chicks (N = 37) died in the nest or were preyed upon by other neighboring falcons due to intermittent and prolonged periods of lack of food that, as we know, are strongly determined by the trade wind patterns.

This year, a total of 213 chicks were ringed in the nest when they were approximately 25 days old. As usual, each individual was ringed with a conventional metal ring with the Aranzadi return address and a yellow plastic ring with a two-digit alphanumeric code, which allows identification at distance. These new ringings are added to the total of individuals ringed since the beginning of the project in 2006, which amounts to 2364 falcons. Although, as we said, the identification of individuals ringed in previous years could not be carried out as we would have liked, we managed to do a total of 146 visual recaptures. Among these readings, it has been possible to verify the presence in Alegranza of a high number of falcons born in 2019 (N = 26). These individuals return to the Chinijo archipelago for the first time after they began their first round-trip migration to Madagascar. This information is of special relevance to determine the survival rates of this fraction of the population and their probability of future recruitment, with a bit of luck, as breeders in the Canarian population of the species.

In 2020, a total of nine specimens equipped with GPS devices were located, five of them nesting on the neighboring island of Montaña Clara. The information stored in the devices could be downloaded successfully in seven of them thanks to the base station located on Alegranza and the network of portable antennas established on both islets.

Unfortunately, there is also bad news. In September we located two dead specimens in the dam. One of them was ringed with Az[7F] plastic ring, so we could verify that it was a female born in Alegranza in 2012 that was breeding on this island, at least since 2017. These individuals were collected by Agentes de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote, following the established survey and dispatch protocol to carry out the necropsy and pertinent analyzes to try to determine the cause of death.

The wind and the sea are two elements that are and will always be irretrievably linked to Eleonora’s falcons and to the islets where they nest. This year, they were blowing against us, but, with perseverance and a lot of effort, we managed to ride out the storm and reach a successful end.


Photo gallery 2020


¡Nueva publicación! / New publication!

Los vientos Alisios regulan la llegada de aves migratorias a Canarias y la reproducción de los halcones que se alimentan de ellas

Nuestro equipo acaba de publicar un estudio en la revista Journal of Animal Ecology donde, utilizando datos de observaciones de campo y la más moderna tecnología, desciframos el mecanismo a través del cual los patrones de vientos Alisios regulan la llegada de aves migratorias a Canarias y, por tanto, el éxito reproductor de esta población de halcón de Eleonor.

“El viento determina le llegada de alimento (pequeñas aves migratorias) a Canarias y los halcones ajustan sus zonas y distancias de caza en función de dichas condiciones de viento. Figura de Gangoso et al. 2020”.

Desde los inicios del proyecto, nos preguntábamos por qué el éxito reproductor de la población de halcón de Eleonor de Canarias fluctuaba tanto entre años y finalmente pudimos demostrar que, como diría Bob Dylan, “the answer is Blowin’ In The Wind”. En este estudio detallamos cómo los vientos Alisios atlánticos, unos vientos que durante el verano y principios de otoño soplan con fuerza del noreste en esta región, determinan la viabilidad de esta población de halcones. El halcón de Eleonor es una especie principalmente insectívora que cada año regresa desde Madagascar para reproducirse en islas del Mediterráneo, llegando a nidificar en las islas mas orientales del archipiélago Canario. Durante la época de reproducción, sin embargo, se alimenta casi en exclusiva de pequeñas aves migratorias que captura sobre el mar cuando se dirigen hacia sus cuarteles de invernada en África. Por este motivo, el halcón de Eleonor no cría en primavera como el resto de aves, sino que se reproduce a finales de verano, para poder alimentar a sus pollos durante la migración otoñal del resto de aves.

En este estudio utilizamos datos de una década (2007-2017) de seguimiento de la población de halcón de Eleonor de Canarias e integramos distintos datos y métodos para reconstruir cómo la disponibilidad de alimento para estos halcones (pequeñas aves migratorias) es regulada por los vientos Alisios. Los movimientos de los halcones se estudiaron con pequeños GPS que permiten conocer hasta dónde se desplazan los halcones para cazar. El flujo de aves migratorias se pudo determinar a partir de la información recogida por un radar meteorológico situado en el sur de Portugal. Las señales de estos equipos, diseñados para la predicción meteorológica se ven alteradas por el elevado numero de pájaros que se desplazan hacia el sur y de esta manera, pudimos estimar el flujo de aves que partía del suroeste de la Península Ibérica hacia África, y modelar sus trayectorias de vuelo a partir de los vientos predominantes en cada tramo de su ruta.

Los resultados de este estudio demuestran que los patrones de vientos del este regulan el flujo de aves migratorias que determina la disponibilidad de alimento para los halcones y sus pollos y, por tanto, su éxito reproductor. Al reconstruir cómo las aves migratorias son desviadas hasta las Islas Canarias por los vientos Alisios conseguimos explicar por qué algunos años todos los pollos de la población mueren de hambre, mientras que otros años cada pareja logra criar entre 2 y 3 pollos con éxito. Este estudio ilustra cómo un fenómeno climático a gran escala puede afectar a los procesos demográficos a escala local y determinar el éxito o fracaso de una población.

Artículo original: https://besjournals.onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/1365-2656.13304


Trade winds regulate the arrival of migratory birds to the Canary Islands and the breeding success of the falcons that feed on them.

Our team has just published a study in Journal of Animal Ecology where, using data from field observations and modern technology, we disentangled the mechanism through which trade wind patterns regulate the arrival of migratory birds to the Canary Islands and hence, the breeding success of this Eleonora’s falcon population.

“Wind determines food availability for falcons (small migratory birds) on the Canary Islands. Falcons adjust their hunting movements based on prevailing wind conditions. Figure from Gangoso et al. 2020”

From the early start of the project, we wondered why the breeding success of the Canarian population of Eleonora’s falcon fluctuated so much between years and finally we were able to demonstrate that, as Bob Dylan would say, “the answer is Blowin’ In The Wind”. In this study we detail how the Atlantic trade winds, winds that blow strongly from the northeast in this region during the summer and early autumn, determine the viability of this population of falcons. Eleonora’s falcon is a mainly insectivorous species that every year returns from Madagascar to breed on Mediterranean islands and even on the easternmost islands of the Canary archipelago. During the breeding season, however, it feeds almost exclusively on small migratory birds that it hunts over the sea when they travel to their wintering quarters in Africa. For this reason, the Eleonora’s falcon does not breed in spring like most birds, but it does in late summer, to be able to feed its chicks during the autumn migration of the rest of the birds.

In this study we use data from a decade (2007-2017) of field monitoring and integrate different data and methods to reconstruct how the food availability for Eleonora’s falcons (small migratory birds) is regulated by trade winds. Falcons’ movements were studied with small GPS that allow us to know how far the falcons travel to hunt. The flow of migratory birds could be determined from the information collected by a meteorological radar located in the south of Portugal. The signals of these radars, designed for meteorological prediction are altered by the high number of birds that move south and in this way, we were able to estimate the flux of birds that depart from the southwest of the Iberian Peninsula to Africa, and model its flight paths from the prevailing winds experienced en route.

The results of this study demonstrate that easterly wind patterns regulate the flux of migratory birds that determines the availability of food for falcons and their chicks and, therefore, their breeding success. By reconstructing how migratory birds are pushed to the Canary Islands by the trade winds, we were able to explain why some years all the chicks in the population die of starvation, while other years each pair manages to raise between 2 and 3 chicks successfully. This study illustrates how a large-scale climatic phenomenon can affect demographic processes at a local scale and determine the success or failure of a population.

Original paper: https://besjournals.onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/1365-2656.13304

Aletas en Gran Canaria / Aletas on Gran Canaria

Un año más, los halcones de Eleonor regresan a Canarias. Los adultos vuelven a sus territorios de cría y los jóvenes a buscar pareja y un sitio donde empezar una nueva etapa como reproductores en los ya disputados islotes de Chinijo. Con otras intenciones regresan también algunos ejemplares más jóvenes, individuos que nacieron el año pasado y que, si bien aún no han alcanzado la madurez sexual, visitan los territorios de cría de sus congéneres, a la vez que empiezan a familiarizarse con la captura de pequeñas aves migratorias que supondrán su principal fuente de alimento en un futuro próximo.

La llegada de todos estos individuos tiene lugar antes de que el flujo de migración otoñal alcance su pico máximo. Durante ese periodo, los halcones de Eleonor continúan alimentándose de insectos, y con frecuencia acuden a islas mayores, como Lanzarote, Fuerteventura e incluso Gran Canaria, donde la abundancia de estos es mucho mayor que en los desérticos islotes de Chinijo.

Las observaciones de colegas ornitólogos que comparten sus observaciones en distintas islas nos permiten conocer estos movimientos y saber un poco más cada día de la ecología de esta fabulosa especie. Un ejemplo de esto son las interesantes observaciones que Xabier Remirez y Luis Alberto Rodríguez han compartido con nosotros. El pasado 31 de julio, Luis Alberto observó a un grupo de al menos cinco ejemplares de halcón de Eleonor cazando insectos sobre los pinares en los Llanos del Salado, en la Cumbre de Gran Canaria. Entre ellos, se encontraba un precioso ejemplar de morfo oscuro que pudo ser fotografiado. En la foto puede apreciarse la anilla plástica de color azul y código XL. Se trata de un macho anillado como pollo en 2017 en la isla de Alegranza que, desde entonces, no había vuelto a verse por Canarias. Esta primera observación de este ejemplar sugiere que podría haberse reclutado como reproductor en la población de halcón de Eleonor de las islas. No obstante, el hecho de que estuviera alimentándose de insectos en Gran Canaria en plena época de reproducción (la fecha media de puesta es el 24 de julio) sugiere también que el alimento escasea en el entorno de Chinijo.

Ejemplar macho de morfo oscuro anillado de pollo por nuestro equipo en Alegranza en 2017. Foto: Luis Alberto Rodríguez Sánchez

El 2 de agosto, Xabier regresó al mismo lugar para seguir disfrutando del espectáculo de ver a estos halcones cazando y comiendo insectos en vuelo. Otro compañero, Jesús García Ubierna, que también acudió poco antes al sitio pudo ver al menos seis ejemplares distintos. Xabier también tuvo suerte. En un grupo de al menos tres individuos, consiguió fotografiar a otro ejemplar anillado. En esta ocasión, se trataba de uno de esos individuos más jóvenes y curiosos, un segundo año calendario. En la foto se puede apreciar el plumaje característico de un morfo claro de esta clase de edad, y la anilla plástica de color amarillo y código 2U que porta, la cual nos indica que se trata de una hembra anillada como pollo el año pasado en Alegranza. Este dato es especialmente interesante porque las observaciones de esta clase de edad, si bien frecuentes, suelen producirse a partir de finales de septiembre, por lo que resulta especialmente interesante saber por dónde se mueven y qué andan haciendo estos jóvenes halcones al inicio del verano. En las fotos de Xabier, también puede apreciarse otro ejemplar de morfo oscuro de la misma edad, aunque en esta ocasión, no estaba anillado. Las fotos muestran una preciosa secuencia de movimientos en vuelo. Halcones de distintas edades, incluida la hembra 2U han seguido viéndose por la zona varios días después, al menos hasta el día 9 de agosto. Las anillas plásticas permiten identificar a los individuos a distancia y en cualquier lugar y momento del año. En 2009 comenzamos a utilizar este tipo de anillas en los halcones de Eleonor de Canarias y hasta la fecha, nuestro equipo ha marcado un total de 1722 individuos, muchos de los cuales han sido recapturados visualmente en años sucesivos.

Hembra de morfo claro anillada de pollo en Alegranza en 2019. Foto: Xabier Remirez

Los halcones de Eleonor son asiduos visitantes de la Cumbre de Gran Canaria. Desde hace años, se observan, sobre todo al inicio del verano, en el entorno de la presa de Los Hornos. Allí encuentran coleópteros y otros insectos, especialmente libélulas. Sin embargo, este año esta siendo particularmente seco. A mediados de julio nos comentaba Daniel González Rodríguez, quien lleva varios años observando aletas en la zona, que la presa tiene muy poca agua y que, ante la escasez de libélulas, los halcones se alimentan de saltamontes que encuentran en los pastizales cercanos. Daniel también compartió con nosotros esta fabulosa foto (uno de los tres ejemplares que observó en 2019) y datos de estas y otras observaciones recientes en la isla, como la de un ejemplar en las inmediaciones de Juncalillo del Sur durante varias semanas, además de los halcones que pudo observar en los pinares de La Cumbre.

Ejemplar de morfo claro sin anillar posado descansando. Foto: Daniel González Rodríguez

Estos datos muestran la importancia de este enclave para las aves, no solo las residentes, sino también especies migradoras, como el halcón de Eleonor. Para una especie altamente especializada en la captura de pequeñas aves durante su migración otoñal durante la época de cría, la existencia de fuentes de alimentación alternativas durante los periodos previos al pico migratorio o en periodos de escasez de alimento asociados a condiciones climáticas adversas, suponen un recurso clave para la conservación de esta población que, recordemos, habita en el extremo meridional o occidental de su área de distribución reproductora.

Desde aquí queremos agradecer especialmente la información y las fabulosas fotos aportadas por todas estas personas, que con sus interesantes observaciones contribuyen a aumentar cada vez más el conocimiento sobre esta fantástica ave rapaz.


Once again, the Eleonora’s falcons return to the Canary Islands. Adults return to their breeding grounds and tasks, while young birds do to look for a partner and a territory to start a new stage as breeders in the already disputed islets of the Chinijo Archipelago. With other intentions, some younger individuals also return, those that were born last year and, although have not reached sexual maturity, visit their conspecifics’ nests. At the same time, 2nd calendar year birds begin to become familiar with the hunting of small migratory birds that will be their main food source in the near future.

The arrival of all these individuals takes place before the autumn migration flux peaks. During this period, the Eleonora’s falcons continue to feed on insects and frequently visit larger islands, such as Lanzarote, Fuerteventura and even Gran Canaria, where the abundance of these is much greater that in the almost barren islets of Chinijo. The observations of fellow ornithologists on different islands allow us to know the falcons’ movements and hence, to learn more about the ecology of this fabulous species. Examples of this are the interesting observations that Xabier Remirez and Luis Alberto Rodríguez have shared with us. On July 31, Luis Alberto observed a group of al least five individuals hunting insects over the pine forest in the Llanos del Salado, at La Cumbre de Gran Canaria. Among them, there was a beautiful dark morph that could be photographed. In the photo you can see the blue plastic ring with the code XL. It is a male falcon that was ringed as a fledgling in 2017 on Alegranza. Since then, he had not been seen in the Canary Islands. This first observation suggests that it could be have been recruited as a breeder in the Canarian population of Eleonora’s falcon. However, the fact that it was feeding on insects in Gran Canaria during the breeding season also suggests that food is scarce around Chinijo.

A dark morph male ringed by our research team on Alegranza in 2017. Photo: Luis Alberto Rodríguez Sánchez

On August 2, Xabier returned to the same place to continue enjoying the spectacle of seeing these falcons hunting and eating insects while flying. Another colleague, Jesús García Ubierna, who also came to the same site shortly before, was able to see at least six different individuals. Xabier was also lucky. In a group of at least three falcons, he managed to photograph another ringed bird. This time, it was one of those younger individuals, a 2nd calendar year. In the photo you can see the characteristic plumage of a pale morph of this age class and the yellow plastic ring with the code 2U, which indicates that it is a female ringed as a fledgling last year on Alegranza. This data is especially interesting because the observations of 2nd cy birds, although frequent, usually take place from the end of September onwards. It is particularly interesting to know where these young birds move and what they are doing at the beginning of the summer. In Xabier’s pics, another dark morph individual of the same age can also be seen, yet in this occasion, it was not ringed. These pics show a beautiful sequence of movements in flight. Falcons of different ages, including the female 2U, have continued to be seen in the area several days later, at last until August 9. The plastic rings allow identifying individuals from large distances and at any place and time of the year. In 2009 we started using this kind of rings on Eleonora’s falcons from the Canary Islands and to date, our team has ringed a total of 1722 individuals, many of which have been visually recaptured in successive years.

A pale morph female ringed on Alegranza in 2019

Eleonora’s falcons are regular visitors to La Cumbre de Gran Canaria. For years, they have been observed, especially at the beginning of summer, in the surroundings of the Presa de Los Hornos. There, they find coleopterans and other insects, especially dragonflies. However, this year is being particularly dry. In mid-July, Daniel González Rodríguez, who has been observing aletas in the area for several years, told us that the dam was almost dry and that, due to the scarcity of dragonflies, the falcons feed on grasshoppers they find in the nearby grasslands. Daniel also shared with us this fabulous photo (one of the three individuals he observed in 2019) and data from these and more recent observations on the island, such as that of a falcon in the vicinity of Juncalillo del Sur for several weeks, in addition to the falcons that he could observe in the pine forests of La Cumbre.

A pale morph Eleonora’s falcon perched on a tree. Photo: Daniel González Rodríguez

These data show the importance of this place for birds, not only resident, but also migratory species such as the Eleonora’s falcon. For a species highly specialized in feeding on small migratory birds during the breeding season, the existence of alternative food sources before of the migration peak or in periods of food scarcity associated with adverse weather conditions, represent a key resource for the conservation of this population that, remember, lives in the southern and western extreme of its breeding range.

From here, we want to specially thank the data and fabulous pictures contributed by all these enthusiastic people, whose their interesting observations contribute to increasing more and more our knowledge about this amazing bird of prey.


Seminario «Futuro del Archipiélago Chinijo» organizado por WWF Canarias


El día 4 de mayo de 2020, tuvo lugar esta charla titulada “Los aletas de Chinijo: centinelas del clima” impartida por Laura Gangoso, dentro del seminario Futuro del Archipiélago Chinijo organizado por WWF Canarias https://seminariochinijo.wordpress.com

El Archipiélago Chinijo, situado al norte de la isla de Lanzarote, es el espacio natural marítimo terrestre más importante de Canarias. También es el lugar de nidificación de aproximadamente 300 parejas de halcón de Eleonor, o Aletas, que constituyen la población más occidental y más meridional de todo el rango de distribución reproductora de esta especie. La charla nos cuenta algunas particularidades de esta importante población y nos muestra cómo las relaciones entre estas rapaces y sus presas (pequeñas aves en el transcurso de su migración otoñal hacia África) son determinadas por los vientos alisios, y cómo esta dinámica determina a su vez la productividad y, en último término, cómo los procesos climáticos a gran escala determinan el futuro a largo plazo de la población de halcón de Eleonor de Canarias.


On May 4, 2020, this talk entitled Los aletas de Chinijo: centinelas del climawas given by Laura Gangoso, within the seminar Future of the Chinijo Archipelago organized by WWF delegation from the Canary Islands https://seminariochinijo.wordpress.com

The Chinijo Archipelago, located in the north of the island of Lanzarote, is the most important natural area in the Canary Islands. It is also home to approximately 300 breeding pairs of Eleonora’s falcons (locally known as Aletas). This population makes up the westernmost and southernmost population of the entire breeding range of the species. The talk tells us some peculiarities of this important population and shows how the relationships between falcons and their prey (songbirds in the course of their autumn migration to Africa) are determined by Atlantic trade winds, and how this dynamics in turn determines falcons’ productivity. Ultimately, it shows how large-scale climatic processes would determine the long-term persistence of the Eleonora’s falcon population from the Canary Islands.